Compra de activos: ¿qué es y qué beneficios te puede ofrecer?

La compra de activos para una empresa, es una estrategia de crecimiento y localización estratégica de capital que cobra interés especial en México.

Esto se debe a que, desde hace un par de décadas, el IVA (Impuesto al Valor Agregado) asociado a estas operaciones es recuperable, siempre y cuando el comprador tenga residencia fiscal en el país.

Este beneficio, establecido en la Ley del Impuesto al Valor Agregado, hace que la compra de activos sea una vía de expansión con incentivo financiero.

Si quieres conocer en qué consiste esta estrategia, cómo se diferencía de la adquisición o fusión de empresas y cuáles son sus principales beneficios, te invitamos a que leas este post hasta el final.

¿Qué es la compra de activos?

Como su nombre lo indica, consiste principalmente en la adquisición de bienes o derechos bajo cualquier título legal.

Esta operación suele llevarse a cabo cuando la empresa quiere obtener, bajo una operación de adquisición, ciertos bienes, títulos financieros, recursos de trabajo o incluso, elementos tecnológicos, con la finalidad de reforzar y potenciar la operación interna y el alcance comercial.

Entre los principales activos que suelen comprarse a través de esta operación encontramos:

  • Bienes inmuebles;
  • Máquinas y plantas de producción;
  • Vehículos;
  • Derechos sobre terrenos, campos de explotación y otros recursos. 

Debido a que implica una transferencia de bienes y/o derechos, la representación legal es parte fundamental de un proceso seguro de compra de activos.

Como compradora, tu empresa debe asegurarse de la procedencia legal de los bienes, así como contar con los instrumentos jurídicos idóneos que, posteriormente, permitan el pleno disfrute y uso de los activos adquiridos.

Principales ventajas de la compra de activos

Junto a la fusión y adquisición de empresas, la compra de activos es una transacción interesante cuando se busca crecer y consolidar la capacidad operativa.

Algunas de las ventajas concretas que ofrece son las siguientes:

Incentivo fiscal

Como mencionamos al inicio del texto, si el comprador tiene su residencia en la República Mexicana, tiene la posibilidad de recuperar la totalidad del Impuesto al Valor Agregado asociado a la operación.

Este beneficio existe desde hace más de dos décadas y busca promover el dinamismo de la actividad comercial y las operaciones entre personas morales.

No obstante, si bien es una gran ventaja, es importante entender que no es exclusiva de la compra de activos.

De hecho, las operaciones de compra de acciones también tienen este beneficio, ya que están exentas de IVA desde un inicio.

Flexibilidad y jerarquización

Bajo esta transacción, tu empresa no estará obligada a adquirir la totalidad de otra organización. En cambio, solo comprará activos que realmente le interesen y necesite, sacando el máximo provecho del presupuesto de inversión disponible.

No se heredan situaciones fiscales desfavorables

En contraposición a la adquisición de empresas, mediante la adquisición de activos de las empresas, la parte compradora no hereda deudas y situaciones fiscales desfavorables, que a largo plazo afectan la rentabilidad de las inversiones.

Retos y desventajas de la compra de activos

También existen ciertos retos y desventajas de la compra de activos que deben considerarse, entre las cuales encontramos las siguientes:

Impuesto a la compra de inmuebles

Si bien es posible evitar el IVA asociado a la transacción, las operaciones de compra de inmuebles físicos – un activo común en este tipo de transacciones – sí tienen impacto fiscal. Es decir que, actualmente, sí existen impuestos que se generan al realizar este tipo de operaciones.

Los principales impuestos son: impuestos de transmisión patrimonial y el Predial (impuesto a la propiedad), que se paga de forma anual.

Mayor tiempo de implementación

Esta es una desventaja cuando comparamos la compra de activos directamente con la adquisición y fusión de empresas.

Cuando se realiza una fusión o adquisición total, simplemente se asume el derecho sobre operaciones y recursos de la otra empresa, que ya están en marcha dentro de una determinada metodología operativa, de resultados comprobados. Por esa razón, la implementación es inmediata y también las retribuciones suelen obtenerse en menor tiempo.

Mientras tanto, cuando se opta por la compra de activos, las empresas deben insertar estos nuevos recursos en sus flujos de trabajo, lo cual puede llevar tiempo de adaptación, ensayo/error y otros desafíos operativos. 

Todo lo mencionado hasta ahora demuestra que la conveniencia o no de la compra de activos obedece directamente a las necesidades estratégicas de tu empresa, así como a su presupuesto y la expectativa de tiempo de obtención de resultados.

La compra de activos es una transacción que ofrece ciertos beneficios fiscales en primera instancia y que se caracteriza por la flexibilidad. No obstante, que su impacto sea tangible puede conllevar mayor tiempo, a la vez que existen costos adicionales asociados a la tenencia de los nuevos activos. 

Para que tengas mayor información estratégica en tus manos y sepas cuál es la vía ideal para expandir tu negocio, te invitamos a que ahora entiendas las particularidades de la adquisición de empresas a través del siguiente post de nuestro blog:

Adquisición de empresas: 5 preguntas que debes hacer antes